Andrés Eliécer Gil Torres

Nació en Villanueva (La Guajira) en Octubre de 1948. Parece increíble que con su tez morena actual su apodo de “Turco” derive de las mismas palabras de su padre cuando al nacer aparentemente lo vio rosadito y rozagante y dijo: “Parece turco”. En Villanueva, como suele ocurrir en estos pueblos guajiros, los “sobrenombres” parecen tener más acogida que los propios nombres, quedó bautizado popularmente como “El Turco Gil” y su nombre “Andrés” pasó a un segundo plano.. El pequeño estudió trompeta y saxofón, pero tuvo como vecino a Emiliano Zuleta, cuyo acordeón le torció el destino. A los 7 años, sacaba el instrumento del baúl del maestro para robarle acordes. Como sabía gramática musical y leía notas, vio que el mágico instrumento solo daba siete de los doce sonidos musicales. Era como un acordeón ‘sin terminar’. O “una máquina de escribir a la que le faltan letras”, recuerda.
“Sólo en 1966 llegaron al país acordeones más tecnificados, que daban mayor armonía a la ejecución” recuerda. En efecto, nuestro paisano ‘El Turco’ Gil, fue el músico que le descubrió nuevos sonidos al acordeón y merced a ese descubrimiento, el maestro Rafael Escalona asegura que el hombre que más sabe de vallenato en Colombia es ‘El Turco Gil’. Y Alfredo Gutiérrez lo inmortalizó como “el músico que se adelantó 30 años al vallenato en el mundo”.


Razón tenían, pues el mismo Emiliano Zuleta no pudo interpretar bien su obra cumbre. ‘La Gota Fría’ sonó como debía cuando ‘El Turco Gil’ la grabó en 1968, y le sacó al acordeón sonidos desconocidos hasta entonces en la escala del vallenato. Por eso lo llamaron el ‘Rey del disonante’.


El “Maestro de Maestros” actualmente tiene en Valledupar una escuela única en el mundo, con alumnos de la Costa Atlántica, Europa y Estados Unidos. Todo comenzó cuando los amantes del vallenato les llevaban a sus hijos para que les enseñara los secretos de hacer cantar y llorar el acordeón como sólo ‘El Turco Gil’ sabía, pero el patio de su casa se llenó de muchachitos y él les daba clases a la sombra de un almendro. Hace 20 años, cuando no cupo uno más, ‘El Turco’ vio la necesidad de buscar una sede y formar una escuela.


Sus alumnos tienen un gran reconocimiento internacional desde que comenzaron a cantar en obras benéficas por toda Colombia y América, han sido uno de los pocos que han cantado en la “Casa Blanca”, residencia del Presidente de los Estados Unidos. Hoy la Escuela del Acordeón, única en el mundo, tiene 1.200 alumnos de la Costa Atlántica, de otras regiones de Colombia y hasta de España, Francia, Argentina y EE. UU y en los conciertos con Los Niños del Vallenato, visten sus trajes típicos: manta para la niña y ‘wayuco’ para los varones. Sus padres, Fidel Hernández y Diva Sinisterra, hacen ‘bolis’ (sánduches en La Guajira), para costearles los pasajes


‘El Turco Gil’ ha hecho de Los Niños del Vallenato los mejores embajadores de Colombia en el exterior. Desde que le cantaron ‘La Gota Fría’ en la Casa Blanca a Bill Clinton, el mundo supo de esa música que arrulló a Gabriel García Márquez. Alejado de toda falta de modestia señala: "Bill Clinton nos dedicó dos páginas en su libro, donde dice: ‘Cuánto desearía que en cada zona de conflicto hubiera un maestro como ‘El Turco’ Gil”. Andrés ‘El Turco’ Gil, maestro de acordeón.


Cuando los días de este villanuevero lleguen inevitablemente a su fin, el folclor vallenato le agradecerá por su contribución al enriquecimiento del la música vallenata y su expansión internacional, el maestro Andrés “El Turco” Gil es una de esas figuras que aún en vida son leyendas es nada más y nada menos que “El Maestro de Maestros”.


Gestores Villanueva mí@ (Edición)
Diario “El País” de Cali (Texto Original)

Alberto "Beto" Murgas

Nació en Villanueva (La Guajira) un miércoles 8 de septiembre de 1948. En la casa donde vio la luz por primera vez Alberto “Beto” Murgas, por el frente entraba la música por los ensayos de la orquesta de Reyes Torres, mientras que por el patio, se colaban las melodías de Juancho Gil, el papá de “El Turco”; y a dos casas de la suya, vivía Emiliano Zuleta Baquero. Se podría decir que Beto Murgas nació arrinconado por la música, que a Beto lo surtió la brisa. Por ese solar, por donde la música abría portillos para untar el oído de Beto, corrieron sus siete hermanos: Enrique, fallecido; Abalis, Rosita, Mary, Eddy y Darío que son músicos y María Irma. Sus padres, ya fallecidos, fueron José Murgas y Rosa Peñalosa.


En el Liceo Colombia hizo la primaria. Sus inicios fueron como los de todos los músicos de Villanueva: un grupo que tocaba con picos de botella ajustados y, en medio, papel celofán; el acompañamiento era con latas, con peinillas... Después, sus idas a La Sierra, un sector finquero donde los abuelos tenían la suya y por donde transitaban los acordeoneros errantes. Sabido de esa circunstancia, Nelson Martínez, un señor que estaba enamorado de una tía suya, se llevó un acordeón muy pequeño, de dos teclados, para que, cuando los juglares llegaran para el 11 de noviembre, día de San Martín y luego para Navidad, le enseñaran a tocar. Aquel sobrino intrépido se lo encontró y empezó “a fregarle la vida al acordeón”. Héctor Gallo, un vecino, se dio cuenta de que “Betico” tenía actitud musical y le enseñó cómo se debía coger el aparato. A los dos meses de estar en La Sierra, cuando Beto bajó de nuevo al pueblo, ya sabía tocarlo para el asombro de sus vecinos y amigos.


Por entonces, aquella camada de prometeros vallenatos formó una agrupación y su primer contrato lo hicieron con Lázaro Morillo, Lacho, por 30 centavos. El compromiso era tocar un caminoteo, en el Carnaval, que consistía en acompañarlos a ellos disfrazados. “¡Nosotros tocábamos por toda la calle, y ellos hacían morisquetas disfrazados...! Nunca le habíamos visto la cara a una moneda propia. Lo primero que hicimos fue comprar un coco, panela y queso, y darnos un banquete. Después, Ezequiela Sánchez quien ya sabía que yo tocaba y no tenía acordeón, fue a Maracaibo y compró un acordeón para que yo se lo pagara con música. Ella hizo una caseta que se llamaba La Mecedora en honor al gallo famoso de Enriquito López. Luego vino la época en la que Emilianito tenía su grupo y yo el mío; los hijos de los ricos armaban bailes y nos ponían a tocar para ver cuál baile se llenaba más. Ahí nos dábamos espuela con quien hoy es el padrino de un hijo mío, Emilianito”. Recuerda Beto Murgas.

Ya en el colegio Roque de Alba, en donde hizo su bachillerato, Beto agarró la onda de la Nueva Ola, pero al final más pudieron sus raíces. En el 65, enamorado, compuso “Amalia” que nunca se grabó, pero que lo hizo conocer: “Un domingo yo estaba en misa y llegó César Mendoza, el rector del colegio El Rosario que tenía un grupo pero no tenía acordeonero, me sacó de la mano y me llevó donde mi mamá para convencerla de que me dejara ir a Bogotá. A mitad de semana nos fuimos y yo me presenté en La Hora Philips. Toqué “Amalia” y dos canciones más. En Valledupar se armó cierto revuelo, la gente preguntaba por qué no habían llevado a Colacho que era el mejor. Lo concreto es que ya todos empezaron a identificar a Beto Murgas. En el 69, cuando ya Alfredo Gutiérrez era Alfredo Gutiérrez, yo le pedí a Fredy Molina que me lo presentara para que me oyera. De esa reunión salió que Alfredo me grabó “Cariñito mío”, lo que me valió entrar por la puerta grande del vallenato”.


Como durante su época de colegio no existía bus escolar y el pueblo era tan chico, los estudiantes se iban a pie a la casa. En esas caminatas siempre iba una muchachita llamada Isabel Cristina Saurith. A ella le decían “La Negra”. “Nos hicimos novios pero ella era muy celosa, entonces le hice: La negra...dice que ya no me quiere, pero, yo sí quiero a mi negrita...”.


En Valledupar empezó a trabajar con el entonces Ministerio de Salud como promotor de Saneamiento Ambiental y estudiaba Tecnología Agropecuaria en la que hoy es la Universidad Popular del Cesar, además de estar ennoviado con Rosa. Sin terminar esa carrera, se fue a la Universidad de Antioquia y terminó Saneamiento Ambiental. “Después me vine para Valledupar y me casé con Rosa Durán Porto. Eso fue en 1974”. Con ella tuvo dos hijos y extramatrimonialmente, tuvo cuatro: Alberto, que estudió Administración de Negocios e hizo una especialización en Finanzas Internacionales, pero se inclinó más por la música. Hoy tiene un grupo que se llama Gusi y Beto y su primer éxito fue “La Mandarina”, jóvenes nominados al Grammy Latino categoría Cumbia/Vallenato (2008), “como buen descendiente de un Villanuevero debe estar en el cuento de los Grammys”, afirman los tirapiedras.


Luego están Fernando, que es economista; Enrique, que también es compositor; Milena, es abogada y vive en Tunja; Lina, que es Ingeniera de Sistemas y María José, que cursa bachillerato. Para un compositor tan exitoso y prolífico como Beto Murgas, resulta muy complicado señalar una de sus canciones como la más querida, pero en el curso de la conversación, he notado que “La negra”, por sus muchas versiones en todo el mundo, “La gustadera”, “Después de viejo”, “Corazón bandido”, “Las morochitas”, “El dengue de tu amor”, “La trilla”, “Mujeres como tú” o “Nativo del Valle”, podrían resultar algunas de las que nombra más frecuentemente.


Los Hermanos Zuleta, Jorge Oñate, Rafael Orozco con el Binomio, Los Betos, Diomedes, en general los mejores, y otros muchos grupos, han convertido sus temas en éxitos inmortales. Cuando hablamos de compositores, me deja clara su admiración por El viejo Mile. Su Gota Fría suma casi 50 versiones, entre ellas, las de Julio Iglesias, María Dolores Pradera y Paloma San Basilio. “Eso no es gratis”, asegura. Y en lo que parece ser un consenso entre los más conocedores, Beto también señala a El pollo, Luis Enrique Martínez, como el más grande acordeonero de la historia.


...Ahora que estamos frente a letras efímeras, huecas y con poca verdad, los amantes del Vallenato celebramos que Villanueva haya parido a tantos guajirazos para este canto y que Beto Murgas siga defendiendo a la música vallenata del facilismo y la mediocridad


Miguel A. Chavarro Buriticá
Gestores Villanueva mi@

Daniel Celedón Orsini

Nació en Villanueva (La Guajira) un martes 21 de marzo de 1950, este pueblo “Cuna de la música vallenata” y de interpretes extraordinarios como: “Chiche” Maestre, “Bolañitos, Los Hermanos Romero, Los Hermanos Zuleta, Jean Carlos Centeno y el mismo Jorge Celedon, su sobrino. Es el menor de 7 hermanos casi todos artistas y descendiente de los fundadores del Liceo Celedon de Santa Marta y de la familia italiana Orsini, en donde se destacaban Grandes cantantes de opera y artistas en general. Desde niño despunto como un cantante extraordinario, Daniel cantaba boleros, baladas y hasta rancheras con un talento tal que se pensaba seria un cantante de opera. Sin embargo nacer en Villanueva y ser cantante de opera es un poco complicado, sencillamente, el hermoso folclore lo conquistó rápidamente.


Realizó sus estudios en el Colegio Roque de Alba de Villanueva y es abogado de la universidad Libre de Barranquilla, ciudad a la que se traslado desde los 20 años y donde cantaba en diversas fiestas. Compuso una hermosa canción llamada "La India" que le grabaría Alfredo Gutiérrez, monstruo de la época, una hermosa historia de amor que le valdría el reconocimiento como compositor. Además compuso una bella canción titulada "Mujer Marchita" que le grabaría Jorge Oñate, escuchada en todo el mundo, traducidas al ruso y alemán.


En el año 1974 junto a otro grande villanuevero, Israel Romero, grabaría su primer álbum para CODISCOS. “Versos Del Alma” de donde se destaca la canción del mismo nombre de su autoría y "La Viajera" de autoría del maestro Lucas Daza. Pero seria hasta 1975 cuando Daniel encontraría su gran éxito con el álbum: “Rumor Vallenato” donde se encuentran canciones como "Digan lo que Digan" “Agustinita" y el clásico del vallenato: "Amanecemos parrandeando". La separación del “Pollo” Irra (fue Daniel quien lo bautizó así) produjo el nacimiento de dos de las mas grandes agrupaciones del folclore vallenato: El Binomio de Oro (Israel y Rafael Orozco) y El doble poder (Daniel e Ismael Rudas)


En el año 1976 graba su super éxito "La Gota Fría", que aparece en el álbum: “Amigo mío” de donde también se destacan "El trajecito Gris", "José casquita" o "la tijera", entre otras. En 1977 graba al lado de otro villanuevero, Norberto Romero, hermano de Israel, el álbum fue titulado “Gira Mundo” donde destaco el éxito "El Chaparrón". En 1978 graba con Norberto el álbum “Diferentes” de donde destacaron las hermosas canciones "Bonito Amanecer"," “El girasol” después reencauchada por los Hermanos Zuleta y otro de sus clásicos la entrañable "Triste Desenlace". Para 1979 Daniel terminaría esta Trilogía al lado de Norberto con un álbum maravilloso: “Grito De Amor” de donde destacan la preciosa canción que le da titulo al álbum compuesta por Roberto Calderón, la canción "los areticos" compuesta por Diomedes Díaz y la monumental "Linda Sabanera" de Octavio Daza. En 1980 y por petición popular regresaría el “DOBLE PODER” al lado de Ismael Rudas con una joya llamada: “Volvimos” de donde se destacan el hermoso clásico "Un día muy Triste" compuesta por Daniel y el inolvidable dúo "Mercedes" compuesta por Adolfo Pacheco.


Con el doble poder consolidado como una de las mejores agrupaciones vallenatas sacarían el álbum más importante de su historia, un clásico perfecto donde no hay canción regular sus 11 temas son perfectos, les hablamos del álbum que hace honor a su nombre el aclamado “excelente” donde se destacan "A Fuego Lento" su gran clásico, compuesto por Daniel Celedon, "la esquinita" de Oscar Cormane y el aclamado dúo con su sobrino Jorge Celedón en “Drama provinciano” seria un álbum de ventas multimillonarias y es ya otro clásico de los más grandes del vallenato.

Daniel en 1985 apostaría por un cambio total de disquera y de acordeonero, el jovencito Gabriel “Chiche” Maestre, miembro de otra Dinastía Villanuevera, “Los Maestres”, del cual también es integrante su hermano Orangel “El pangue”. El “chiche” sería el escogido para un álbum sacado con una disquera venezolana llamada Discarime un buen álbum quizás el menos exitoso de su carrera, pero que en realidad no tuvo promoción ninguna en Colombia la disquera se iría a la quiebra y los perjudicados fuimos todos los amantes al vallenato porque fue un álbum maravilloso que hoy es una joya de coleccionistas se fabricaron muy pocos en aquella época su titulo fue: “Apoyándonos Mutuamente”, destaco la hermosa canción "Imágenes de Poesía" de Rosendo Romero un poema cantado por la gran voz potente del vallenato.


Un esperado retorno con el Doble Poder se daría en 1988 con el álbum “Diviértete” un regalo para sus fans que ya había por el mundo, se destacaron las canciones “el loco del pueblo” y “Leña verde” de Daniel, después de la gira de este álbum Celedon se dedico a la vida familiar y sus negocios propios. Hizo una joya en 1990 llamada: “DANIEL CELEDON Y SUS AMIGOS” grabando con los mejores acordeoneros del mundo: Bolañitos, Alfredo Gutiérrez, “Beto” Villa, “Fello” Gamez, Israel Romero y por supuesto Ismael Rudas, este álbum es un regalo para los amantes del vallenato además hizo un dúo con estercita forero es otra joya de coleccionistas.

En 1994 saca Daniel al lado de “Fello” Gamez el álbum “Mi Cuñadita” de donde se destacó un
merengue de Urbano Díaz llamado "Que dice argentina" un homenaje a la goleada de Colombia (5 -0) una descripción perfecta del partido hecha magistralmente por el hermano de Leandro Díaz y la canción "mi cuñadita" de la cual existe un video clip. El álbum lo saco RODVEN de venezuela. En 1998 saca otro álbum con el doble poder que seria la ultima pagina en la historia de esa agrupación llamado “Nuevamente”, lo llevó hasta Francia, Bélgica y Holanda, en aquella gira y se destacan una de las primeras composiciones de Jorge Celedon el tema "te adore" después de esta gira Daniel decide retirarse de la música o al menos hacer una pausa larga. Se dedica a las producciones musicales de jóvenes y a la composición, pendiente de los nuevos cantantes de la Dinastía Celedon como Jorge, el “chiche” o su hijo Juan Carlos que reside en Europa y lleva el folclore vallenato por aquellos lares.


En el 2005 les regala a sus fans un álbum llamado: CON TODOS SUS ACORDEONEROS una joya impresionante que además sacaría con una compañía de su propiedad llamada (VETERANS RECORDS) como un regalo a sus amigos y fans. Cada vez que se inspira Daniel saca cosas extraordinarias como lo fue su aparición en el DVD de su sobrino Jorge: “GRANDESEXITOS EN VIVO” ante 100 mil personas en Bogotá al lado de Ismael Rudas.


Se dice que esta pendiente de los detalles de la evolución de Jorge Celedon pues ha sido su impulsador desde niño y el reciente Grammy alcanzado por Jorge (2007) iba dedicado como el mismo Jorge diría a su padre musical y descubridor y seria no solo el triunfo de COLOMBIA y de Jorgito sino tamben de DANIEL.


Daniel es un hombre familiar, sencillo profundo, intelectual y noble que le ha dado mucho a nuestro folclor que ha dejado en alto a Colombia y que desde hace muchos años enseño otra manera de actuar como interprete vallenato y que junto con personas como Israel Romero y su sobrino Jorge han hecho empresa seria en esto de la música vallenata. Él ha sido uno de los pioneros del vallenato de calidad de uno de los mejores interpretes que ha dado Colombia y un compositor profundo, social y amoroso que ha logrado conjugar sus raíces guajiras con la magnificencia de la música profunda explorando sonidos nunca oídos en el vallenato, ganador de cientos de festivales en canción inédita, de discos de oro, y embajador de el vallenato por el mundo.


De esas cosas que uno nunca imagina, este villanuevero, coincidió con la trágica muerte de Diana de Gales (La Princesa LADY DI) y fue el artista colombiano que representó al País en una serenata al pie de su tumba días después en Paris. Estuvo en Rusia en festivales de canciones latinoamericanas compartiendo con los grandes compositores hispanoamericanos como Leon Gioeco, Pablo Milanes o Silvio Rodriguez. Sus canciones han sido interpretadas por LEO DAN, esparciendo esa sabiduría por el mundo y dejando el nombre de nuestro país muy en alto.



Ulises Nardin/Gestores Villanueva mi@